Mantenimiento de tu coche para conducir seguro en Navidad
Quedan apenas unas semanas para que llegue la Navidad. Y, con ello, llegan para muchos las vacaciones, los viajes con amigos, las reuniones familiares y, en consecuencia, aumenten los kilómetros en carretera. Según la DGT, cada año se producen en estas fechas alrededor de 17 millones de desplazamientos. Al haber más coches en la carretera, se trata de uno de los momentos del año en los que más precauciones debemos tomar al volante. Pero además, las lluvias, el hielo y la nieve están más presentes que nunca en la carretera en esta época del año.
Por eso, es conveniente llevar el coche al taller para hacerle una revisión y una puesta a punto, sobre todo si tenemos pensado hacer un viaje largo. De esta manera, evitaremos imprevistos y podremos disfrutar de las fiestas con nuestros seres queridos sin sobresaltas que puedan dar al traste con todo. Siendo los frenos, los neumáticos, las luces y los niveles de aceite algunos de los aspectos más importantes que deben tenerse en cuenta.
Luces
Es muy importante revisar las luces, ya que son uno de los elementos clave de la seguridad. Tanto para que podamos ver nosotros como para que nos vean el resto de conductores que circulan por la vía.
Niveles de líquidos
Los líquidos del coche deben ser revisados cada cierto tiempo sin importar la estación del año, ya que son los que hacen que el motor funcione correctamente y que no sufra una avería. El anticongelante, el líquido de frenos o el refrigerante deben comprobarse especialmente antes de hacer un viaje largo, siempre con el motor en frío y con el vehículo en llano, cumpliendo con las medidas establecidas por el fabricante y rellenando en caso de que sea necesario.
Frenos
Si los frenos de tu coche están desgastados, debes tener en cuenta que la distancia de frenado se incrementa considerablemente. Por eso, los conductores deben permanecer atentos y revisarlos cada 20.000 km. Y es que si no están en perfectas condiciones, las posibilidades de sufrir un accidente aumentan considerablemente, lo cual puede echar a perder las fiestas con nuestros seres queridos.
Neumáticos
En Navidad y los meses más fríos en general se recomienda usar neumáticos de invierno en lugar de los tradicionales. Estos neumáticos están preparados para circular con mayor seguridad por las carreteras cuando llueve, nieva o hiela, aumentando el nivel de seguridad. Y es que necesitan 5 metros menos para frenar el coche cuando se conduce a 50 km/h, reduciendo la posibilidad de tener un accidente.
Batería
La batería del coche debe comprobarse al menos una vez al año si no queremos quedarnos tirados porque el coche no arranca. Lo cual es especialmente importante en invierno, ya que si hay poca batería, con el frío, al motor le costará más arrancar. Seguramente no querrás que esto te ocurra justo antes de salir de viaje para ir a cenar con la familia en Nochebuena. Dependiendo del uso, el ciclo de vida de la batería será mayor o menor, pero es importante que se revise cada cierto tiempo para no llevarnos una sorpresa. Y no sólo mirar que tenga batería, sino que además los bornes estén limpios y que no se salga líquido o que tenga óxido. En estos últimos casos, habría que cambiarla.